Conciencia social
Leonel Pinela
Leonel Pinela nació el 9 de diciembre de 1967. Su llegada a San Antonio obedece a un tema laboral. Leonel Pinela trabajaba entonces en la Recreactiva Caja de Compensación Los Héroes en Santiago y fue trasladado a la localidad de San Juan, San Antonio, para labores administrativas del centro recreacional de la empresa.
Se radicó en San Juan-El Tranque y continuó como dirigente sindical en la empresa, llegando a transformarse en el presidente nacional del sindicato de trabajadores de la caja de compensación.
Pinela sabía que llegaba a una comuna con grandes problemas sociales y económicos y poco a poco comenzó a involucrarse con las demandas de sus compañeros de trabajo, sus vecinos, las localidades rurales y finalmente entró de lleno, desde su consciente mirada y vocación social, en la lucha por defender los derechos de los trabajadores, los ciudadanos, la salud, la educación, la cultura y el medio ambiente.
Su incansable labor sindicalista, comenzó a hacerse latente en su alma política cuando era un estudiante, aunque nunca fue dirigente estudiantil, ni en la enseñanza básica ni media.
Pero su oportunidad dirigencial le llegaría cuando ingresó a cursar un diplomado en gasfitería en la Universidad del Trabajador en Santiago. Ahí se convirtió en el presidente del centro de alumnos, el cual funcionaba en períodos de sólo tres meses. “Por primera vez en la Universidad del Trabajador hubo un presidente que permaneció los tres períodos del año en el cargo”, dijo con gran orgullo Leonel Pinela.
Su buena evaluación como dirigente estudiantil llamó la atención de las autoridades, al punto que el rector de la entidad académica, Felipe Berríos, le solicitó a Pinela que encabezara, con los alumnos del Infocap, la construcción de cien mediaguas para la gente que no contaba con solución habitacional en distintas comunas de Santiago.
Era el incipiente proyecto “Un techo para Chile” y Pinela ya dejaba huella por su estilo de trabajo directo y efectivo.
No le costó mucho integrarse pronto a la comunidad de San Juan-El Tranque y tampoco le costó mucho darse cuenta que habían serios problemas de agua potable, más bien se daba cuenta de que en pleno siglo XXI estaba viviendo en una localidad sin sistema de suministro de agua potable ni alcantarillado.
Malos olores, moscas, poca agua, camiones, postergación, aislamiento. De eso se dio cuenta Pinela y lo vivió en carne propia.
Comenzó a luchar por sus derechos y los de sus vecinos, sacó a la gente a la calle a protestar.
Se dio cuenta que cosas similares sucedían en Leyda, Malvilla, Agua Buena. Creó y actualmente preside el Consejo Rural Comunal y no dejó de ser presidente nacional del sindicato de trabajadores de la Recreactiva Caja de Compensación Los Héroes y presidente de la Junta de Vecinos San Juan-El Tranque.
Fue uno de los pilares de los últimos años de lucha del pueblo de Leyda por conseguir el sistema de agua potable y alcantarillado. Hoy se construye la red de empalme y suministro de agua potable para las casas de los leydanos y además se firmó hace pocos días el convenio entre Esval, la Dirección de Obras Hidráulicas y la Junta de Vecinos San Juan-El Tranque, para concretar durante el 2012 la llegada del suministro de agua potable para esta localidad rural.
Se radicó en San Juan-El Tranque y continuó como dirigente sindical en la empresa, llegando a transformarse en el presidente nacional del sindicato de trabajadores de la caja de compensación.
Pinela sabía que llegaba a una comuna con grandes problemas sociales y económicos y poco a poco comenzó a involucrarse con las demandas de sus compañeros de trabajo, sus vecinos, las localidades rurales y finalmente entró de lleno, desde su consciente mirada y vocación social, en la lucha por defender los derechos de los trabajadores, los ciudadanos, la salud, la educación, la cultura y el medio ambiente.
Su incansable labor sindicalista, comenzó a hacerse latente en su alma política cuando era un estudiante, aunque nunca fue dirigente estudiantil, ni en la enseñanza básica ni media.
Pero su oportunidad dirigencial le llegaría cuando ingresó a cursar un diplomado en gasfitería en la Universidad del Trabajador en Santiago. Ahí se convirtió en el presidente del centro de alumnos, el cual funcionaba en períodos de sólo tres meses. “Por primera vez en la Universidad del Trabajador hubo un presidente que permaneció los tres períodos del año en el cargo”, dijo con gran orgullo Leonel Pinela.
Su buena evaluación como dirigente estudiantil llamó la atención de las autoridades, al punto que el rector de la entidad académica, Felipe Berríos, le solicitó a Pinela que encabezara, con los alumnos del Infocap, la construcción de cien mediaguas para la gente que no contaba con solución habitacional en distintas comunas de Santiago.
Era el incipiente proyecto “Un techo para Chile” y Pinela ya dejaba huella por su estilo de trabajo directo y efectivo.
No le costó mucho integrarse pronto a la comunidad de San Juan-El Tranque y tampoco le costó mucho darse cuenta que habían serios problemas de agua potable, más bien se daba cuenta de que en pleno siglo XXI estaba viviendo en una localidad sin sistema de suministro de agua potable ni alcantarillado.
Malos olores, moscas, poca agua, camiones, postergación, aislamiento. De eso se dio cuenta Pinela y lo vivió en carne propia.
Comenzó a luchar por sus derechos y los de sus vecinos, sacó a la gente a la calle a protestar.
Se dio cuenta que cosas similares sucedían en Leyda, Malvilla, Agua Buena. Creó y actualmente preside el Consejo Rural Comunal y no dejó de ser presidente nacional del sindicato de trabajadores de la Recreactiva Caja de Compensación Los Héroes y presidente de la Junta de Vecinos San Juan-El Tranque.
Fue uno de los pilares de los últimos años de lucha del pueblo de Leyda por conseguir el sistema de agua potable y alcantarillado. Hoy se construye la red de empalme y suministro de agua potable para las casas de los leydanos y además se firmó hace pocos días el convenio entre Esval, la Dirección de Obras Hidráulicas y la Junta de Vecinos San Juan-El Tranque, para concretar durante el 2012 la llegada del suministro de agua potable para esta localidad rural.